El autor de "Escola de menciñeiros" aporta su conocimiento gastronómico de los grelos en la cocina:

" Se pueden cocer enteros los grelos, si es que después de cocidos y bien escurridos, se les va a echar una ajada, cosa muy frecuente en el país. Pero hay una receta mejor y que también se usa: se parten los grelos con los tallos -a los que se les quitaron los hilos y se pelaron- y se cuecen. En una sartén se echa manteca de cerdo -o, si se quiere, aceite- y se doran en ella unos ajos. Cuando estén los ajos dorados, se echan los grelos en la sartén y se remueven hasta que chupen toda la manteca o el aceite. Se sirven muy calientes y pueden ir acompañados de huevos fritos".

Don Álvaro remataba esta receta aconsejándonos que "si son grelos de final de temporada, y ya están un poco amargos y ponen amarillos los dientes del tenedor, se moja en la yema del huevo un trozo de pan frito, y entonces se mete en la boca algo perfecto y complejo de sabor".

Cunqueiro desaconsejaba aliñar esta ensalada con rustrido.

Se ponen las hojas de gelatina a remojo en agua fría. Troceamos los grelos y se escurren bien. Pasamos por la batidora todos los ingredientes para rellenar un molde untado con mantequilla. Dejamos enfriar en la nevera dos horas.

Desmoldamos e introducimos la mousse en una manga pastelera para rellenar tartaletas. Combina bien bien con un queso cremoso.

Se trocean los grelos y se escurren bien. Pasamos por la batidora todos los ingredientes para rellenar un molde untado con mantequilla. Se cuece en el horno a temperatura media al bañomaría hasta que esté cuajado.

Se deja enfriar, se saca del molde y se cubre con mermelada de manzana antes de servir, o con un queso cremoso tipo Cebreiro.

Se trocean los grelos y se escurren bien. Pasamos por la batidora todos los ingredientes y se rellena un molde untado con mantequilla. Se cuece en el horno a temperatura media al bañomaría hasta que esté cuajado.

Se deja enfriar, se desmolda y se sirve en porciones con una salsa Bechamel.

Cocidos en agua abundante y con la sal necesaria, se echan en una sarten grande en la cual hay aceite sin rancio y alguno dientes de ajo quemadios de puro fritos. Se les da unas vueltas sobre el fuego y se sirven.

Coced grelos que sean gordos y, una vez cocidos, separad los tronchos de la verdura. Cortad aquellos en trozos de dos o tres centimetros y freidlos en buen aceite. Batid huevos, saladlos y formad con los grelos una tortilla francesa.